San Sebastian De Los Reyes-Real Oviedo

              FRACASO Y DECEPCIÓN

ALINEACIONES: 
U.D. San Sebastián de Los Reyes: Miguel Ángel; Edu Ruiz, Iñaki, Martín Vaquero, Castañera; Biendi, Vázquez, José Luis (Ramiro, minuto 50), Portilla (Jairo, minuto 73); Moncho y Héctor (Gazapo, minuto 86)
Real Oviedo: Lledó; Owona, Juanpa, Juanma, Álvaro; Abasolo (Jandrín, minuto 55), Pelayo (Pascual, minuto 59), Aitor Sanz (Rubiato, minuto 66), Nano; Manu Busto y Martins

ÁRBITRO: 
Mateo Valero, perteneciente al Comité Valenciano.  Amonestó a los locales Moncho y Héctor, y a los visitantes Aitor Sanz y Juanpa

GOLES: 
1-0, minuto 32. Héctor, de cabeza
2-0, minuto 84. Héctor, de disparo cruzado  

La peor de las pesadillas de la afición azul se cumplió ayer en Madrid. Como si de una película de terror se tratase, el equipo de Pacheta hizo el más difícil todavía en su contra, perder en un partido lamentable mientras que el Coruxo ganaba al Albacete. El Oviedo volvió a darle un disgusto de los gordos a sus seguidores en la última jornada de liga prolongando la larga lista de desilusiones de una afición que ayer tampoco dejó solo a su club. El primer equipo azul suma un nuevo fracaso, con mayúsculas, aunque el técnico carbayón se niegue a reconocer esa palabra y se escude en otras apreciaciones incluso ayer una vez finalizado el partido pese a que si pidió perdón a los aficionados.

Mientras el Oviedo salía sin orgullo, sin honor y sin garra al Nuevo Matapiñonera, en O Vao el Coruxo y el Albacete despejaban cualquier duda sobre un supuesto pacto. Los vigueses no se fiaban del empate a cero y salieron a morder al conjunto manchego. Ni eso afectó para bien a un equipo azul que volvió a firmar un partido lamentable a domicilio aumentando la nómina del año a domicilio. Los de Pacheta no vencen fuera de casa desde el partido de Valdebebas si exceptuamos el choque en Miramar ante el Marino.

El primer aviso ya fue del Sanse con un lanzamiento de Vázquez que se marchó arriba. Que el Oviedo no estaba cómodo era ya evidente y las sensaciones recordaban a las de otras muchas tardes cuando el conjunto carbayón juega fuera del Carlos Tartiere. Cuenca, Vecindario, A Coruña, Toledo y un largo etcétera de desastres como visitante. El plan B, tan reclamando por el entorno, tampoco apareció la última jornada de liga.

El primer tiempo fue desarrollándose sin pena ni gloria. Parecía que la posesión era de los asturianos pero si alguien daba sensación de peligro, aunque sin ocasiones, eran los madrileños. Así hasta que en el minuto 32 un centro desde la derecha acabó en la cabeza de Héctor. El delantero remataba entre Juanpa y Owona y ponía el balón en el fondo de la red. Los cientos de aficionados azules no daban crédito a lo vivido.

La reacción pareció llegar pero sólo fue un espejismo. En el 35 Juanpa llegó a rematar una balón escorándose hacía la izquierda pero el esférico impacto en un defensa. Un minuto después Pelayo remató muy forzado de cabeza y su envío llegó muy manso a las manos de Miguel Ángel.

Segunda parte

La salida de la segunda mitad discurrió por los mismos derroteros. De hecho, hasta el minuto 39 en el que el Sanse sentenció el partido al contragolpe, lo más destacado en el Oviedo fueron los tres cambios. Las entradas, escalonadas, de Jandrín, Pascual y Rubiato en los puestos de un desaparecido Abasolo, Pelayo y Aitor Sanz tampoco sirvieron para mucho más.

Un remate flojo de Martins, un par de disparos lejanos y desviados de Pascual y una buena acción personal de Jandrín fueron las únicas aportaciones de los de Pacheta en los segundos cuarenta y cinco minutos.

El segundo tanto de Héctor supuso el mazazo definitivo y, para más inri acto seguido, el Coruxo lograba el ansiado gol por los carbayones al inicio del choque para alimentar sus opciones de entrar en el play-off de ascenso a Segunda División. Los aficionados llegados desde Asturias se dividían en dos grupos, los resignados con lágrimas en los ojos y los que proferían gritos contra el banquillo y los futbolistas.

Final gris

El énesimo fracaso del Real Oviedo deja muchas incógnitas en el futuro de una entidad que celebrará su Junta de Accionistas por orden judicial y en la que los futbolistas, cuerpo técnico y empleados no reciben sus nóminas desde hace tres meses. Sin nadie al mando del club capacitado para planificar la próxima temporada, el futuro de Pacheta como entrenador y de José Manuel Martínez como director deportivo es una de las cuestiones que deberían de tratarse a partir de mañana en un club normal, algo que a día de hoy no es el equipo de la capital de Asturias.

FOTOGRAFIAS: IGNACIO FELGUEROSO