lunes, 27 de febrero de 2012

Sin Cambio no hay Futuro

Marcha por un cambio

Un millar de aficionados oviedistas se manifiesta por las calles de Luanco contra el consejo de administración del club




 LUANCO, NACHO AZPARREN 
Unos quince minutos después de la hora fijada, los aficionados se pusieron en marcha. A las cinco y cuarto resonó el primer cántico en la plaza del cristal de Luanco, punto de partida de la manifestación azul. Como no podía ser de otro manera, el famoso «¡Alberto vete ya!» fue el himno escogido por los seguidores del Oviedo para iniciar su enésimo acto de protesta contra los actuales gestores del club.

Al igual que ocurriera en León, una gran pancarta encabezaba la marcha. El lema elegido en esta ocasión era contundente: «Sin cambio no hay futuro». Los datos de las cuentas del Oviedo hechos públicos la semana pasada y que revelaban que el club ha generado un déficit de 1,8 millones de euros en la última temporada sirvieron esta vez de incentivo para movilizar a la gente. El grupo Symmachiarii fue el primero en convocar la manifestación y la Asociación de Peñas Azules del Real Oviedo (APARO) no dudó en secundar la propuesta.

Las calles de Luanco se tiñeron del azul oviedista. Los mil manifestantes centraron el acto en protestar contra el consejo de administración personificado en Alberto González, todavía lejos de España. Tal y como estaba previsto en la convocatoria de la marcha, el acto de repulsa contra los mandatarios se acabó en Miramar. La idea era clara: una vez que se iniciara el partido, la única función de los seguidores azules era el de apoyar a los de Pacheta.

Miramar vivió una invasión azul en toda regla. Mientras un millar de aficionados avanzaba hacia el campo del Marino, otros mil ya ocupaban su lugar en la grada esperando el comienzo del partido. La llegada de la marcha oviedista provocó un ligero caos minutos antes de comenzar el partido. Nada que no tuviera una rápida solución. Los últimos efectivos de la afición oviedista se posicionaron detrás de la portería defendida por Lledó en la primera mitad.

La animosa afición visitante vivió su momento álgido en la recta final del choque. El balón peinado por Quiepo se convirtió inmediatamente en una invitación a la fiesta. Nano se encargó de rubricarla con el primer gol. Como viene siendo habitual en los últimos tiempos, el «Volveremos» rugió tras el primer tanto azul.

Pocos minutos después llegaría el segundo acto festivo. También con Nano como protagonista, esta vez con la involuntaria colaboración de Rafa Ponzo.

El tanto del andaluz fue casi más celebrado en el banquillo visitante que en la propia grada. El abrazo en el que se fundió la expedición oviedista ponía de manifiesto que la victoria en Luanco significaba algo más que tres simples puntos. La arenga moral era totalmente necesaria. Pacheta no dudó por un momento en abandonar su papel de entrenador para unirse en la celebración como un jugador más.

 RAMÓN JULIO GARCÍA / EDUARDO ALONSO | LUANCO
Antes del inicio del partido, más de un millar de aficionados del Real Oviedo han realizado una marcha desde el centro de Luanco, desde la plaza del Cristal, al campo de Miramar en señal de protesta por la gestión del dueño y presidente del club, Alberto González, en la que se pidió su salida inmediata.
La acción, promovida por la Peña Symmachiarii, con el apoyo de la Federación de Peñas del Real Oviedo, ha marchado, de forma pacífica y escoltada por agentes de la Guardia Civil y de la Policía Local, detrás una pancarta con el lema 'Sin cambio, no hay futuro', aunque también se han podido ver otras como 'Ayuntamiento, solución ya' o 'Alberto González, delincuente'.
La manifestación ha terminado a su llegada a Miramar, hacia las 17.45, momento en el cual los aficionados han ido entrando al  campo.


Un millar de aficionados del Oviedo piden en Luanco la marcha de Alberto González

Más de un millar de aficionados del Real Oviedo se manifestaron esta tarde en Luanco para pedir la salida de la gestión de la entidad al máximo accionista y presidente, Alberto González, que sigue fuera de España desde que viajó a América días antes de las pasadas fechas navideñas.
Bajo el lema 'Sin cambio, no hay futuro', que rezaba en la pancarta principal de la marcha, los seguidores oviedistas se manifestaron pacíficamente por las calles de Luanco, sin incidentes, y escoltados por las fuerzas de orden público. Los peñistas azules llegaron al campo de Miramar un cuarto de hora antes de comenzar el encuentro, fijado para las seis de la tarde.
La protesta fue promovida por la Peña Symmachiarii, con el apoyo de la Asociación de Peñas del Real Oviedo (APARO), y también pedía en una pancarta al ayuntamiento de la capital del Principado, segundo máximo accionista de la SAD azul, la intervención inmediata en la sociedad, que sigue pendiente de la convocatoria de junta de accionistas para cerrar el pasado ejercicio 2010-2011 y presentar a los socios la situación financiera de la entidad carbayona.


FOTOGRAFIAS: Jonás Sánchez

No hay comentarios:

Publicar un comentario